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viernes, 28 de marzo de 2014

Pesto casero de final de mes

Esta entrada se la voy a dedicar a Miriam, una persona muy especial con la que compartí clases, patios, bocadillos exquisitos que eran capaces de mantener el pan crujiente cuando los demás llevábamos el pan chicloso y reblandecido, confidencias y muchos momentos de risas y lágrimas. Hace unos años se marchó a Italia, cambiando de tierra que no de mar y añadiendo a su mochila una cultura hermanada con la nuestra y unos ingredientes impresionantes para cocinar.

¿Qué ha motivado este viaje de recuerdos? El maravilloso ...






Podríamos decir que es una especie de puré de hierbas, ajo y frutos secos, pero como lleva el aceite que liga todos los ingredientes es una emulsión, una mezcla de líquidos no miscibles pero que unidos forman una textura homogénea

Su nombre proviene del italiano "pestare" que es la acción de majar con un mortero, ya que tradicionalmente es una salsa que como el "all-i-oli" se liga manualmente


Se dice que es una receta muy antigua, hija del "moretum" que hacían los campesinos romanos del 25 d.C. y que era una preparación de hierbas machacadas, queso, aceite y vinagre y que lo usaban para rociar el pan. Otros lo emparentan con la "agliata" medieval, una especie de escabeche de aceite que incorporaba tomates, ajos y vinagres y que los pescadores italianos usaban como conservante y aderezo de pescados y carnes. Por el nombre ya imagináis qué ingrediente predominaba.


Lo cierto y documentado es que la primera mención de esta llamada "salsa" aparece en 1863, en un libro escrito por Giovanni Battista Ratto, La Cucinera Genovese y considerado el recetario más completo de la región italiana de Liguria. Por esto, el pesto original lleva la coletilla de "genovés". 

La receta más fiel sería con mortero y se usaría un diente de ajo por cada 40 hojas de albahaca:

1. Las hojas se lavan, se secan bien y se reservan. 

2. Empezamos majando ajo y piñones: pueden haberse tostado previamente y la cantidad va a gusto aunque para un ajo, unos 50 gramos está bien. Parar cuando se cree una crema espesa

3.Añadir las hojas de albahaca: la variedad genovesa o de Prà es la más aromática y valorada pero hemos ido a un súper cualquiera y cogeremos la que esté disponible.

4.Añadir sal gruesa y e incorporar poco a poco el aceite a medida que se maja hasta tener una consistencia homogénea y cremosa. 

5.Añadir con cuchara el queso: o Parmesano o Pecorino, que tiene un sabor parecido, pero con un punto picante buenísimo.

Esta podría ser una receta, pero ojo, los italianos son muy suyos con la cocina y no sólo pidieron en 2011 la Denominación de Origen Protegida para su salsa sino que tienen un campeonato anual en Génova que lo gana el mejor elaborador de pesto: 


Visto lo visto, y teniendo en cuenta que estoy a kilómetros de allí y no se van a enterar, me voy a poner rebelde. Paso del mortero que no estoy para machaques y... vaya... el precio de los piñones está por las nubes y yo a final de mes. ¿Qué tenemos en el armario? Almendras crudas. Estupendo. Hay una variante llamada "pesto alla Trapanese" que cambia los piñones por almendras y también incorpora pulpa de tomate fresco. Interesante.

Pesto casero de final de mes:

Hemos puesto el ajo, la albahaca fresca, las almendras, la sal y el aceite de oliva juntitos en el vaso de la thurmix. Y potencia. Me he sentido culpable -jo, almendras- pero qué narices, la receta original no llevaba ni piñones. Así que otro día lo pruebo con nueces. Soy una radical. 

Hay algo a tener en cuenta cuando cambiamos mortero por thurmix: con el mortero, es el sabor de la albahaca el que predomina, pero con la thurmix, el ajo sube más, por lo que tened ojo con la cantidad que ponéis o será igual que hayáis puesto albahaca que un geranio de la abuela.

Lo que sí que no perdono es el parmesano que yo añado al final, manualmente, para que mantenga su aroma. Es caro pero cunde muchísimo y más si lo rallamos con un rallador "microplane": tiene cuchillas muy afiladas y más pequeñas que los ralladores normales por lo que corta el alimento sin romperlo, que es lo que ha sucedido cuando nos encontramos trozos de queso que arrastrados por la fricción caen sin rallar y después parecen grumos a la deriva entre la pasta.

La cantidad de aceite depende del gusto de cada uno. Si la quiero para carne o pescado, la dejaré espesa, para que se adhiera bien. Si es para ensalada o pasta, más fluida, con más cantidad de aceite, para que impregne y se reparta por todo el plato.

Y un último apunte: si tenemos hojas de menta que nos han sobrado, probad a incorporarlas. Para ensaladas le da un toque fresco a la albahaca que con queso tipo burgos mezcla estupendamente. 

Quizás Miriam se ha tirado de los pelos como la "Mamma" italiana en que se va a convertir porque por esos lares la receta es totalmente distinta. Pero así la invito a que colabore y me mande alguna recetilla, que estoy segura que comen de vicio y mi envidia es muy insana. 

¡Val più la pratica della grammatica! 

No tengo muy claro qué significa... pero suena bien. A presto!



Voy a hacerme una caseta de ladrillos rojos


Quién no ha visto o jugado con los bloques de colores de Lego, yo sí. Horas y horas me he pasado montando, desmontando y volviendo a montar de todo; y no te digo nada cuando salieron las ruedas y partes móviles. Una cuerda, unas cuantas piezas de Lego y un teleférico de la cama al armario; útil no es que fuese pero divertido no cabe duda. Pues bien, unos ingenieros de Google amantes de Lego decidieron un día crear un programa que les permitiera hacer construcciones con piezas de Lego y no hace mucho lo hicieron público para que todo el mundo "pudiera, puediesa o hubierase podido" crear sus propias obras.

Todo a golpe de ratón: el set de piezas no es muy elevado pero permite hacer "cositas" chulas con el uso de la imaginación, que al fin y al cabo es la finalidad del juego.

Si os fijáis en la imagen, que es una captura de pantalla de la ventana de Google Chrome ah! se me olvidaba que lógicamente esta aplicación funciona perfectamente con Google Chrome tanto para pc como para tabletas aunque las tabletas deben ser un poco potentes para que puedan ejecutar WebGL que es el entorno gráfico que utiliza para pintar la pantalla. 

En fin, que me lío con especificaciones y no explico lo que quiero. Como decía, si os fijáis en la pantalla, en la parte derecha disponemos del cuadro de piezas, permite girarlas, cambiarlas de color y seleccionar el tipo de pieza, en la base de las piezas y dos pestañas BLOQUES LEGO y BLOQUES EXTRAS, en esta segunda pestaña podréis encontrar puertas y ventanas y alguna pieza más.

En la parte central de la pantalla tenéis la pieza base sobre la que debéis ir apilando las piezas y en la parte derecha tenéis zoom y orientación de cámara, ademas de un comando de repetición de piezas por si hacéis construcciones que necesitan gran cantidad de piezas repetidas. Como hay gente que con esto no tiene suficiente, si te das de alta en la página podrás disponer de retos y la posibilidad de guardar tus construcciones. Disfrutad...

Eh!! y la dirección, es esta: https://www.buildwithchrome.com/builder#

VIERNES 28 DE MARZO... LAS 6 DE LA MAÑANA...

"Ohhhhhhhh" (a esas horas... el nivel de autocrítica está por los suelos)




miércoles, 26 de marzo de 2014

En ruta: ahorrar comprando comida de animales

Hoy dormía plácidamente tapada hasta las cejas, atrapando la colcha como quien se agarra a una tabla de salvación, en un microclima de calor estupendo, cuando levemente han comenzado las quejas detrás de la puerta. Al principio era un rumor suave, como un ruido sin importancia que se cuela en el sueño. Pero lo que era un rumor ha comenzado a convertirse en una llamada persistente y ha terminado con un "leches, qué narices quiere el gato". Como un histérico maullaba y sabía que había convertido su "¿te vas a levantar ya, dulce ama?" en "o abres la puerta o meo todo lo que hayas mirado con cariño alguna vez".

Con cara de pocos amigos, pelos de la Bruja Avería y un frío de narices he abierto la puerta bruscamente y allí estaba mirándome fijamente y retándome a que le dijera algo. Sumisa, he ido a la cocina y he confirmado lo que pensaba... se había quedado sin comida. Brrrr. Él estaba sentado en la puerta y yo diría que he escuchado "será desgraciá...". Cuando me he girado, callaba como siempre, para confundirme.

El problema ha llegado al ir a reponer comida y... ¡horror! me queda un puñado escaso que no le va a durar ni la mañana. Así que toca ponerse estupenda (es un decir) y ¡en ruta!

Normalmente compro la comida de gato por internet. Durante las búsquedas y comparativas que he hecho de precios incluyendo impuestos y gastos de envío, siempre me ha resultado más barata la web de Zooplus. Cada semana tienen ofertas en comida, tienen apartado outlet, descuentos por compras de packs, todo tipo de marcas, accesorios y envío gratuito a partir de 35€ por lo que al final, nunca llegas a pagarlos. Además te permiten pagar con VISA, por contrarrembolso y con transferencia, puedes llamarlos a un teléfono fijo (nada de 902) y los envíos llegan en menos de una semana si tienen stock. Estupendo. 

La única pega que encuentro es que no tienen una zona de medicación veterinaria que estaría genial para los que tenemos animales que toman tratamientos crónicos y que hay que buscar por otro lado. Yo en ese caso, compro en la web de Tienda animales online que tienen buenos precios y también gastos de envío gratuitos a partir de 29€.

El problema es que justamente ahora necesito algo rápido, para hoy mismo y voy a acercarme a una tienda que me han recomendado: JOVID


En la foto tenéis la dirección pero yo os escribo lo que mi gps ha encontrado: C/ Bassa, 11 en Parets del Valles. Está en un polígono industrial, lo que normalmente es sinónimo de dar muchas vueltas y terminar dos pueblos más allá del destino, pero en este caso, llegamos a la primera. Se trata de una especie de gran almacén con todo tipo de piensos, latas, artilugios, juguetes, complementos para mascotas de todas las razas y colores. Vas a encontrar de todo. Vas a envidiar esas camitas confortables con huellas bordadas y querrás cambiar tu colcha por una caseta de perro. Si estás mal de la cabeza, claro.

Trabajan, además, una marca que está recomendada por veterinarios y que suele ser más barata que otras marcas especializadas, Flatazor y que nosotros hemos comprado esta vez para probar si nuestros gatos la aceptan -hemos dejado una urna para que voten al lado de la tierra- y así tener más opciones a la hora de comprar. Además, hemos visto que tienen una zona de venta de medicamentos veterinarios, por lo que de una vez hemos comprado lo que necesitábamos para un mes. Y he jugado con bolas de colores y me he cepillado suavemente con un rascador y he querido meter la mano en el acuario para cazar peces y... he puesto el pin de la Visa, hemos cargado la comida en el coche y para casa. Como la adulta que soy.

Comparando con la compra por internet que siempre hacíamos, nos ha salido un 10% más cara, pero aquí no tenemos que pensar en gastos de envío, en estar en casa cuando llegue el paquete, ni en comprar muchísimo de una vez. Y comparando con lo que te puede costar en veterinario o en tienda de barrio... ufff. Hay muchísima diferencia. Lo único es que necesitaréis sí o sí coche así que lo mejor es montar una excursión con otros amigos que tengan animales y a disfrutar de una mañana poligonera. Mmmm. 

Si conocéis otras webs o direcciones donde comprar comida de animales bien de precio, abajo tenéis la zona de comentarios. ¡Compartidlo! Por el bien de nuestros bolsillos y de nuestros bichos. 

lunes, 24 de marzo de 2014

Espaguetis déjà vu: cómo hervir pasta y espesar salsas

En la entrada del día 21 de marzo prometimos explicar qué haríamos con la salsa que nos había quedado y que habíamos refrigerado. Como en casa está prohibido tirar y empezamos el blog con mucho contenido cárnico decidimos pasarnos a los hidratos de carbono. Energía rápida para el cuerpo. 




Cuando preparamos pasta nos encanta el "venga echa a ojo" y sucede que terminamos comiendo tres días lo mismo, sólo que el primero está al dente y estupenda y el tercero es una plasta uniforme de harina grumosa. Así que nos grabamos a fuego que la ración de pasta SECA (de la que hay que hervir) son 100 gramos si comemos plato único. Si no, con 80 gramos y una ensalada tenemos más que suficiente. Y la cantidad de agua, 1 litro por 100 gramos de pasta, si no la pasta la absorberá toda y no podrá terminar su cocción, una tragedia.

Cada tipo de pasta tiene sus minutos de cocción en el paquete, lo que a veces no tenemos claro es cuándo empiezan esos minutos: empiezan desde que el agua comienza a hervir con la pasta dentro. 

La pasta se echa con el agua hirviendo, se remueve unos minutos para que no se pegue, EN ESE MOMENTO SE PONE LA SAL, no antes porque si no el agua tarda más en hervir y eso cuesta dinero. Se deja un fuego medio-alto y cuando vemos que vuelve a hervir empiezan a contar esos minutos de cocción. Después cada uno podemos elegir el punto que más nos guste, pero lo normal es el dente, o blando por fuera y un poquito duro por dentro

A la hora de sacar, si vamos a servir inmediatamente, se lleva al escurridor, se agita para soltar el agua sobrante y a los platos con sus "toppings". Nada de dejarla dormitando en la pica mientras pongo la mesa o miro pasar esas nubes tan espectaculares por la ventana porque la pasta seguirá cociendo con el calor residual y se nos quedará "blandurria". 

Si el caso es que hervida la pasta prefieres ponerte a tocar el ukelele porque te ha entrado el momento de inspiración, corta la cocción con agua fría debajo del grifo y removiendo bien. Así evitas que se pegue y que se pase su punto. La dejas escurrir y después de crear tu LP ya puedes añadirle lo que quieras, calentarla con su salsa en una cacerola -no recomiendo microondas porque se calentará sin uniformidad y sin mezclar sabores- y servirla.

Nosotros, como teníamos la salsa de la receta anterior ya pasada por la thurmix y colada, vamos a prepararla para que coja una textura que permita que no resbale entre los espaguetis y termine de nuevo en el fondo del plato. En nuestro caso, no teníamos mucha cantidad -medio litro-, por lo que no podíamos dejar que se nos redujera que es lo ideal para cualquier salsa: para reducir, ponemos a hervir una salsa y vamos dejando que se evapore hasta conseguir la textura que nos interesa.

Así que vamos a espesarla. Hemos elegido espesar con maicena porque es rápida, no cambia el sabor principal y queda una salsa fina y bien ligada ya que prácticamente es "pegamento" alimenticio. Para que no se formen grumos, ponemos un poco de salsa en un vaso, en frío, y una cucharadita de maicena ya que no queremos muchísimo espesor, sino sólo que ligue. Removemos bien hasta que quede disuelta. Ponemos a hervir toda la salsa y añadimos removiendo el vaso con la maizena. A medida que suba la temperatura veremos cómo va espesando. Si necesitamos más espesor, podemos coger una parte de la salsa, apartarla, volver a disolver maizena e incorporar. Siempre diluir antes porque si no se formarán grumos, aunque eso se puede solucionar a posteriori con otra pasada de thurmix.


Salsa espesada, ponemos los espaguetis ya cocidos -sí, tocamos el ukelele- en una cacerola, calentamos removiendo bien para que se mezcle todo y servimos espolvoreando queso y orégano. Si el queso es "parmeggiano" y el orégano es fresco, mucho mejor. Si es el trozo de queso duro que vive permanentemente en un rincón de la nevera y el orégano seco que estaba de oferta, va a estar bueno también. Recordad que estábamos ante una salsa de muslos de pollo, por lo que también podemos añadir trocitos de pechuga salteado y va a complementar de maravilla.

¡Que aproveche!